El yacimiento termal de As Burgas, se localiza en la parte final de una vaguada natural que divide en dos al núcleo histórico de la ciudad y que desemboca en la margen derecha del rio Barbaña. En ellas surgen varios manantiales encontrándose entre los más representativos los de A Burga Alta, A Burga Baixa y O Fervedoiro. Este conjunto de manifestaciones termales dentro de la misma unidad geomorfológica representa el sistema geotérmico de media entalpia más importante a nivel nacional. Todos los autores coinciden en señalar la gran riqueza de manantiales aflorantes en esta zona de la ciudad de Ourense, destacando de ellos su elevada temperatura, alrededor de 66 ºC, y su gran caudal, alrededor de 3,01 Litros por segundo.
El asiento cristalino granodiorítico sobre el que se asienta el área termal de Las Burgas presenta una porosidad primaria prácticamente nula. La filtración, circulación y almacenaje de las aguas subterráneas y, dentro de ellas, las aguas termales en particular, se producen a través de la red de fracturas del material base que da lugar a una porosidad secundaria.
Dado el carácter hidrológico de los materiales ígneos que componen el sustrato, el movimiento del agua en su interior está condicionada por la fracturación que las rocas presentan dando lugar a los acuíferos denominados fisurales. Las fisuras presentes, en función del estado tensional que soportan, facilitarán la circulación y el almacenaje del fluido; aquellas que a la vez afecten a zonas profundas podrán ser conductoras de agua termales.
El circuito hidrológico de estas surgencias parte de la infiltración del agua meteórica que percola por el subsuelo y descienden por gravedad hacia niveles más profundos elevando du temperatura, no tanto por una anomalía del manto, desechada por falta de evidencias, sino por el calor generado en las propias rocas por la desintegración de isótopos radioactivos así como el calor latente producido por los movimientos sísmicos recientes, a los cuales se asocian. Una vez el agua en las zonas interiores de la corteza la diferencia de potencial que se genera entre las zonas de recarga, topográficamente elevadas, y las de descarga, a cotas inferiores, la expansión del vapor de agua, la acción de los gases ocluidos y disueltos y la acción de la temperatura provocan el ascenso del fluido y determinan el nivel piezométrico de esta agua que al ser cortado por la topografía provoca la aparición de la surgencia.
En estas fotografías podemos observar que el dragón de Montealegre ya no puede contemplarse en la actualidad por el crecimiento del paisaje urbano, sin embargo, a mediados del siglo pasado se mostraba majestuoso en lo alto, para señalar la procedencia de las perlas del dragón, que asimilamos a las burbujas que se producen en la surgencia del Fervedoiro.
Los alumnos observan con curiosidad las perlas del dragón, animal asociado al elemento madera que alimenta al fuego que sale de su boca, que a su vez calienta el agua meteórica infiltrada a través de un sistema fisural, a una temperatura de 100 – 120 ºC y 1.000 – 1.500 m de profundidad a para luego emerger a 66 ºC de temperatura media.
Los geólogos consideran que las fuentes de As Burgas están unidas con Montealegre por medio de una falla en dirección este-oeste. Con los mapas realizados en 3D, apreciamos que las perlas del dragón están asociadas a una vena secundaria, lo que confirma su conexión y el desarrollo de la ciudad de Ourense desde la época romana hasta nuestros días. Es llamativo comprobar que las edificaciones emblemáticas de Ourense están situadas sobre una vena secundaria del dragón: As Burgas, la catedral de San Martiño y el Monasterio de San Francisco, como intentando dominar la VUIVRE que serpentea bajo tierra.